Convirtiendo los Problemas en Oportunidades con la Permacultura
Cuando observamos la naturaleza, vemos conexiones y relaciones mutuamente beneficiosas entre plantas, microorganismos, los pájaros, insectos y animales. Por ejemplo, la bióloga de renombre, Elaine Ingham, ha ayudado a demostrar que millones de microorganismos tienen un sistema de trueque con las raíces de las plantas, intercambian los minerales extraídos del suelo por carbohidratos, proteínas y azúcares exudadas por las raíces de las plantas. ¡Eso es increíble, una economía de trueque debajo de la tierra! La permacultura es una ciencia de diseño multidisciplinario que ha inspirado el desarrollo de nuestra finca educativa.
La permacultura fomenta que observemos con detenimiento los patrones que naturalmente ocurren y apreciar la eficiencia, estabilidad y productividad de los ecosistemas naturales.
¿Alguna vez has visto a un grupo de voluntarios trepados en una escalera podando los mangles de La Parguera, o alguien pasando una podadora en las praderas de Dakota del Sur? ¿Alguna vez has visto a un guardabosques de una reserva natural como El Yunque, cuidadosamente desyerbando los hierbajos que crecen debajo del dosel denso del bosque? ¡Claro que no!
Los ecosistemas sin perturbar y bien establecidos encuentran naturalmente un equilibrio y estabilidad que por lo general está ausente de los sistemas creados por los humanos.
La permacultura, inspirada por el balance y productividad de ecosistemas naturales, nos ofrece un número de «principios de diseño» que no solo sirven para aconsejar la planificación e implementación de sistemas agrícolas, sino también guiar todos los aspectos del desarrollo humano, incluyendo la ubicación de casas, calles y sistemas de energía y agua. Aún más, estos principios de diseño pueden inspirar sistemas sociales dinámicos y colaborativos tal como el desarrollo de cooperativas, proyectos sin fines de lucro y colaboraciones entre empresas.
Éste es uno de mis principios favoritos de la permacultura: maximiza las interacciones beneficiosas entre los elementos de un sistema. Esto ocurre en ecosistemas saludables y en comunidades y familias muy unidas. Éste es otro de mis favoritos: convierte los problemas en oportunidades. ¡Encuentro esto muy relevante en relación con todos los retos que enfrentamos en la agricultura, en el desarrollo de terrenos y en trabajar en colaboración con mucha gente!
Vamos a viajar en el tiempo… En el 2012 adquirimos el terreno para nuestra finca educativa de 15 cuerdas y el suelo estaba en una condición muy pobre. Los dueños previos usaron por años maquinaria pesada, herbicidas y fertilizantes sintéticos para mantener el terreno y los cultivos. El suelo sufrió por los desequilibrios severos muy comunes en nuestra región (incluyendo muchas fincas convencionales en los trópicos); era muy ácido, susceptible a la erosión, muy compactado y carente de actividad microbiana saludable. Estas condiciones del suelo provocaron que los cultivos fueran más susceptibles a plagas y enfermedades, y dependientes de insumos grandes de fertilizantes sintéticos y agua para mantener la productividad.
En una conversación con Paula, John y yo en el 2012, recordábamos los retos que tuvimos al restaurar la fertilidad del suelo de nuestros terrenos degradados. Después de compartir nuestras frustraciones de cómo hubiésemos querido que fueran las cosas, soñando de los beneficios de poder haber empezado nuestros proyectos en suelos bellos y fértiles, decidimos aceptar nuestro destino y interpretar nuevamente la situación como una oportunidad. Paula señaló que estas condiciones se repiten en muchos proyectos agroecológicos nuevos en Puerto Rico, y lo vimos como una oportunidad para demostrar cómo las técnicas de la permacultura pueden restaurar efectivamente la productividad y salud del suelo. ¡Incluso, fue una oportunidad para documentar el proceso y compartirlo con los demás!
Además de integrar estrategias de manejar de agua que hicieron una gran diferencia a favor de restaurar nuestra tierra, dependemos muchos de los servicios de unos contribuidores resilientes y, a veces menospreciados, a la fertilidad de suelos: los árboles leguminosos. Para saber trabajar junto con los árboles leguminosos, es útil entender sus funciones en la naturaleza. Después de las perturbaciones en los terrenos boscosos causados por huracanes, incendios o despeje por maquinaria pesada, las leguminosas de crecimiento rápido se establecen, pueden crecer en áreas difíciles para otras plantas. Desempeñan el papel de especies pioneras, mejorando las condiciones del suelo, proveyendo sombra parcial en unos pocos años y creando un ambiente necesario para plantas de madera dura, frutales y otros árboles clímax se desarrollen.
Hemos visto los beneficios de trabajar en conjunto con plantas leguminosas de crecimiento rápido en el establecimiento de siembra de árboles frutales y las terrazas agrícolas. Algunas de nuestras compañeras leales y tolerantes incluyen Leucaena, Gliricida sepium, Tithonia diversifolia e Inga vera, que todos se encuentran creciendo silvestres en Puerto Rico. De hecho, mucha gente de nuestra región consideran estas plantas como malezas problemáticas, sin saber utilizar su crecimiento agresivo en servicio de la fertilidad del suelo. Con el conocimiento correcto y la aplicación de estos principios podemos convertir estas plantas en colaboradoras en vez de una plaga. Nuestras amigas muy trabajadoras nos ayudan a soltar suelos compactados, a añadir nitrógeno y carbono al suelo, como forraje para los animales, como sombra y proveer biomasa para nuestra composta para los huertos y sembradíos. Con los años, según los árboles frutales crecen y el papel de las leguminosas se vuelve menos importante, se podan a menudo y gradualmente se eliminan.
En estos momentos, estamos agradecidos por haber tenido la oportunidad para demostrar los resultados de nuestra aplicación de los principios de diseño de permacultura y animamos a los agricultores nuevos a seguir marchando a pesar de la presencia de condiciones desfavorables de suelo.
Seremos atrevidos y positivos ante los retos, buscando siempre convertir los problemas en oportunidades para la colaboración, creatividad y determinación.
Cuéntame, ¿de cuáles maneras has aplicado estos principios? ¡Me encantaría escuchar tus ideas de cómo aplicar estos principios en tu huerto, proyectos y vida!