Un Supermercado en su Patio
Gracias al acceso a tanta información que tenemos a nuestro alcance, podemos saber sobre cualquier persona, lugar o cosa en cuestión de minutos. Pero "saber" sobre algo a través de la lectura y la audición suele dejar lagunas en el proceso de aprendizaje. Las experiencias de aprendizaje práctico nos permiten desarrollar una comprensión más profunda y completa de una materia o un concepto. Y ese es el enfoque pedagógico que adoptamos en Plenitud PR: ofrecer oportunidades para que te ensucies las manos -literalmente- y te sumerjas de lleno.
Ángela Reynoso y Pedro Dones recibieron una profunda capacitación en la producción de alimentos de manera agroecológica a través de nuestro curso anual de 6 meses con Josco Bravo en el 2019. Su deseo de profundizar en su práctica y conocimientos agrícolas, así como su relación con las raíces de su isla y con la Madre Tierra, fue evidente desde el principio. Incluso después de horas bajo el sol ardiente, cubiertos de tierra y repelente de insectos, Ángela y Pedro siempre salían de los campos de cultivo con grandes sonrisas y la cabeza llena de preguntas. Su dedicación llevó a Rebekah, la extraordinaria líder de nuestro equipo de agricultura, a pedir a Ángela y a Pedro que participaran en un programa de mentoría para el año siguiente - una oportunidad de 7 meses para servir con el equipo de agricultura en Plenitud PR. En febrero de 2020, Ángela y Pedro empezaron a reunirse semanalmente con Rebekah para aprender en mayor detalle sobre sistemas de cultivo y administración. Ellos dedicaron incontables horas de servicio en Clementine, nuestro invernadero de túnel alto, así como en las terrazas agrícolas de la finca. Después de la práctica adicional, ¡incluso tuvieron la oportunidad de co-enseñar el curso de Josco Bravo que habían tomado previamente a un nuevo grupo de 12 estudiantes!
"La primera semana, sembré más de 200 plantas de cebollines en una tierra muy fértil hecha de composta de hongos... Fue un trabajo muy duro y con mucho sudor. Nuestra jornada era de 7:30 am a 12:30 pm"
La experiencia de mentoría con Plenitud PR les "abrió los ojos" a los métodos sostenibles de producción de alimentos que no utilizan mega-tractores ni pesticidas. Pedro reflexionó sobre esta nueva perspectiva en relación con el sistema de importación de alimentos de Puerto Rico:
"El 85% de lo que comemos en Puerto Rico viene del puerto y no de una finca puertorriqueña. Pero todo lo que necesitamos para producir (para alimentarnos) ya está disponible para nosotros y sin costo alguno".
Son muchos los pasos que se dan para cultivar alimentos, pero ninguno tan complicado que no pueda aprenderse a través de la experiencia y la conexión con la tierra. Ángela explicó parte del proceso que utilizamos para cultivar productos con restos de alimentos reciclados y materia orgánica: "Aprendimos a hacer bancos de lasaña: plantamos hortalizas sobre un par de capas de hojas secas, restos de alimentos, hierba cortada, estiércol, más hojas secas y una última capa de hierba cortada". Este proceso, junto con la elaboración de los tés de abono y otros remedios para combatir las plagas, resultó en más de lo que Ángela y Pedro podían imaginar.
"Maíz, col rizada, lechugas, gandules, tomates, cebolla verde, pepino, calabaza, pimientos, cilantro, zanahorias, brócoli, repollo, albahaca, berenjena... ¡¡EA RAYETE!! Un supermercado apareció en nuestra tierra en pocos meses!" - Pedro
Un supermercado en su patio. Se trata de un recurso y una libertad indescriptiblemente valiosos, especialmente en Las Marías, donde se encuentran tanto nuestro proyecto como las parcelas de nuestros aprendices. Las Marías es un desierto alimentario, donde el pasillo de productos frescos más cercano en un supermercado (aunque sean productos importados) está a más de 30 minutos de distancia. Esta capacidad de ser autosuficiente y sustentable ha tocado tan profundamente a Ángela y Pedro que se han comprometido a compartirla con otros agricultores. Su sueño es tomar lo que han adquirido en su experiencia de mentoría con nosotros y difundirlo, plantando semillas de conocimiento en las fincas vecinas de toda la comunidad.
Pedro reflexionó sobre su experiencia y la resumió perfectamente: "Todo comienza con la voluntad de empezar." Estamos agradecidos por el salto de fe que dieron Ángela y Pedro al comenzar sus trayectorias agrícolas con nosotros, y estamos deseosos de ver todo lo que lograrán.